El gobierno establece un precio máximo para el agua potable
En un movimiento audaz para la protección del consumidor, el gobierno presentó el jueves un proyecto de ley con el objetivo de establecer un precio máximo para el agua potable en puntos de venta donde existe una competencia de precios inadecuada. Esta medida busca ofrecer un respiro a los consumidores, especialmente en momentos de dificultades económicas.
La nueva legislación propuesta otorga al ministro de industria la facultad de fijar precios máximos en ciertos bienes de venta al por menor. El precio máximo del agua se aplicará en espacios como aeropuertos, puertos, recintos deportivos, playas, sitios arqueológicos, museos, instalaciones sanitarias, teatros, cines, parques temáticos y zoológicos.
El proyecto de ley especifica que el tope de precio solo se aplicará al autoservicio. El precio máximo se determinará tras una encuesta de mercado que tendrá en cuenta, entre otros factores, el costo de producción/importación, una cantidad razonable para los costos operativos y un margen de beneficio razonable para el vendedor. Los productos para los cuales el ministro podrá establecer un techo de precios son las botellas de agua – en envases de 500 ml o 750 ml.
En caso de que un vendedor infrinja la ley, el servicio de protección al consumidor tiene la autoridad para imponer una multa administrativa de hasta 10.000 euros. Si la violación persiste, las autoridades pueden imponer una multa de 1.000 euros por cada día continuado de violación. Las multas serán pagaderas de inmediato y el pago de la misma no se suspenderá aunque la decisión del servicio de protección al consumidor sea impugnada ante el tribunal administrativo.
Si un infractor no paga la multa, el ministerio tomará medidas legales y recuperará el monto como deuda civil adeudada al estado. Con estas medidas, el gobierno refuerza su compromiso con la




