El “León de Limassol” establece un nuevo récord mundial
En una muestra de fuerza y
El reto consistía en superar las 15 saltadas en 60 segundos, pero Khazov, con una asombrosa marca de 21 saltos en tan solo 30 segundos, no solo cumplió sino que superó con creces el desafío. Este momento de triunfo fue atestiguado por una audiencia en vivo y certificado por los jueces del Guinness World Record.
“Este intento de récord fue un sueño hecho realidad para mí”, expresó Khazov. “Pisar ese escenario y hacer historia fue algo surrealista”. Sin embargo, su camino hacia este logro no fue sencillo. Con una estatura imponente de 6 pies y 5 pulgadas y un peso de 180 kg, Khazov está lejos de ser un atleta promedio. Es precisamente esta personalidad grandiosa la que lo ha hecho querido por fans alrededor del mundo.
“Competir por Chipre significa todo para mí”, comentó Khazov. “Soy básicamente chipriota, esta es mi casa”. Además de ser un hombre fuerte, Khazov es gerente de proyectos de TI y habla tres idiomas: inglés perfectamente, ruso por su país de nacimiento y griego porque ha vivido en la isla por más de 30 años.
Su vínculo con Chipre es profundo y es esta fuerte conexión la que impulsa su pasión por representar a Chipre en el escenario mundial. “Cuando subo a esa plataforma, no solo compito por mí. Compito por Chipre”, afirmó Khazov. En los últimos años, se ha clasificado sexto y séptimo en la Strongman Champions League y nunca ha quedado por debajo del décimo lugar en ninguna competencia profesional.
A pesar de haber enfrentado adversidades como una embolia pulmonar y diversas lesiones, su
Mirando hacia el futuro, Khazov ya tiene en la mira el próximo desafío. Mientras continúa entrenando para las próximas competiciones de strongman, su dedicación sigue siendo inquebrantable. “Este récord es solo el comienzo”, declaró Khazov. “Estoy listo para enfrentar lo que venga y hacer que Chipre se sienta orgulloso”. En el mundo de las competiciones de strongman, Khazov se destaca no solo por sus notables hazañas de fuerza, sino también por el espíritu inquebrantable que lo impulsa hacia adelante.