El futuro de los recortes fiscales y su impacto en las familias
En un reciente mensaje a través de X, la plataforma anteriormente conocida como Twitter, el presidente Joe Biden anunció que, de ser reelecto, permitirá que los amplios recortes fiscales implementados por el expresidente Donald Trump expiren sin buscar su renovación. Esta decisión ha generado preocupaciones entre observadores económicos, quienes advierten que las familias de clase media y trabajadoras podrían terminar pagando más impuestos en una economía que ya presenta desafíos significativos.
La Ley de Reducción de Impuestos y Empleos de 2017 (TCJA, por sus siglas en inglés), conocida popularmente como los “recortes fiscales de Trump”, está programada para expirar a finales de 2025. A pesar de que Biden y muchos otros en la izquierda sostienen que el paquete benefició principalmente a grandes corporaciones y al denominado “1% más rico” de Estados Unidos, expertos en política fiscal han cuestionado esta afirmación.
Según el Tax Foundation, un grupo de pensamiento no partidista, si el Congreso no actúa para extender la TCJA, los estadounidenses enfrentarán una bajada de impuestos en 2026. Noah Peterson, editor del Tax Foundation, explicó que la TCJA no solo redujo los impuestos a las empresas y modificó el sistema fiscal internacional, sino que también reformó el código del impuesto sobre la renta individual, reduciendo los impuestos para todos los grupos de ingresos en promedio. Sin embargo, estas reducciones están programadas para expirar después de 2025, lo que resultaría en facturas fiscales más altas para la mayoría.
La TCJA redujo la mayoría de las siete tasas del impuesto sobre la renta individual, amplió los tramos impositivos y duplicó la deducción estándar, entre otros cambios beneficiosos para los contribuyentes individuales. Peterson señala que décadas de investigación económica demuestran que las altas tasas marginales del impuesto sobre la renta crean desincentivos para trabajar, ahorrar e invertir, lo que a su vez afecta negativamente al crecimiento económico.
En contraste con la postura actual del presidente Biden, la Casa Blanca durante la administración Trump destacó cómo los recortes fiscales estaban ayudando específicamente a las familias de clase media. La administración Trump indicó que la TCJA duplicó el Crédito Tributario por Hijos y lo hizo disponible para más familias de ingresos medios. Además, casi el 60% del total de los recortes fiscales brutos se destinaron a familias. La TCJA también duplicó casi la deducción estándar, lo que permitió a las familias de ingresos medios eximir más de sus ingresos de impuestos.
Ante el anuncio del presidente Biden de permitir que estos recortes fiscales expiren, Tom McClusky, Director de Asuntos Gubernamentales de CatholicVote, expresó su preocupación al afirmar que las políticas del presidente buscan atacar a la familia por cualquier medio posible, en este caso, llevándolas a la bancarrota con impuestos. McClusky añadió que estas políticas continúan apuntando a la clase media y a las personas con familias numerosas.