La renuncia de Humza Yousaf sacude al SNP
El líder escocés Humza Yousaf dimitió el lunes, poniendo en peligro la gobernabilidad del Partido Nacional Escocés (SNP) y obstaculizando sus aspiraciones independentistas del Reino Unido. Esta crisis representa una caída sorprendente para el SNP y fortalece la posición del Partido Laborista de Reino Unido antes de las elecciones nacionales previstas para este año.
El dominio del SNP ha disminuido, y Yousaf no ha logrado reunir suficientes apoyos para sobrevivir a las votaciones de confianza, lo que ha desembocado en una pugna por el liderazgo dentro del partido. El SNP alcanzó un gobierno mayoritario en Escocia en 2011, lo que llevó a un referéndum de independencia en 2014. A pesar de que los escoceses votaron ‘No’ a la independencia, el SNP consolidó a los partidarios del ‘Sí’ para ganar 56 de los 59 escaños escoceses en el parlamento del Reino Unido en 2015.
Bajo la anterior líder Nicola Sturgeon, el SNP se opuso al Brexit en el referéndum de 2016, una postura popular en Escocia aunque el Reino Unido en su conjunto votó por salir de la UE. El partido ha continuado presionando por un segundo referéndum sobre la independencia del Reino Unido. En coalición con los Verdes, el SNP promovió políticas ambientales y sociales que alienaron a algunos tradicionalistas con sus planes de relajar las reglas para el reconocimiento legal de las transiciones de género.
Sturgeon renunció el año pasado y desde entonces ha estado involucrada en un escándalo de financiación del partido con su esposo, quien fue acusado este mes de malversar fondos. Ambos niegan haber cometido actos ilícitos. Cuando Yousaf la reemplazó, fue ampliamente visto como un candidato de continuidad. Sin embargo, algunos legisladores del SNP han cuestionado las prioridades progresistas del partido bajo Sturgeon y Yousaf.
La semana pasada, Yousaf dijo que desecharía la coalición del SNP con los Verdes escoceses, quienes estaban descontentos con su decisión de eliminar un objetivo clave de cambio climático, con la intención de gobernar en su lugar como una minoría. Pero no logró obtener el apoyo necesario para sobrevivir a las votaciones de confianza previstas para esta semana. Los Verdes criticaron a Yousaf por ceder a “fuerzas reaccionarias” en su partido al abandonar el acuerdo de coalición.
Con la popularidad del SNP en descenso, una encuesta de YouGov en abril colocó al Partido Laborista por delante del SNP en una elección del Reino Unido por primera vez desde 2014. Una elección general en todo el Reino Unido debe realizarse dentro de los próximos nueve meses. Si el SNP pierde escaños ya sea en el parlamento escocés o en el británico, podría socavar aún más los esfuerzos del partido para obtener un mandato para un segundo referéndum de independencia.
Las encuestas de opinión muestran un panorama bastante estático en el apetito por la independencia, con la encuesta de YouGov encontrando que el 53% de los votantes rechazaría la independencia y el 47% la apoyaría.
Yousaf dijo que permanecerá como primer ministro interino hasta que se elija un nuevo líder del SNP. Hay un plazo de 28 días para nombrar a un nuevo primer ministro, y el SNP iniciará un nuevo concurso de liderazgo para nominar a alguien al cargo. Si ningún primer ministro cuenta con el apoyo del parlamento después de que hayan pasado 28 días, se convocará una nueva elección al parlamento escocés.
