Repercusiones de una Ofensiva Israelí en Rafah
En una reunión privada el lunes, El rey Abdullah de Jordania advirtió al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre las graves consecuencias que podría tener una ofensiva israelí en Rafah. Según un comunicado del tribunal real jordano, el rey Abdullah expresó su preocupación por un posible “nuevo masacre” de civiles palestinos y solicitó una acción internacional urgente para evitar la escalada del conflicto.
Israel realizó ataques aéreos en Rafah el lunes y pidió a los palestinos que evacuaran partes de la ciudad, donde más de un millón de personas desplazadas por la guerra de siete meses están aglomeradas. El domingo, Hamas reiteró su demanda de un fin a la guerra a cambio de la liberación de rehenes, propuesta que el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu descartó rotundamente. Además, Hamas atacó el cruce de Kerem Shalom hacia Gaza, lo que, según Israel, resultó en la muerte de tres de sus soldados.
El comunicado jordano indicó que Abdullah, en su encuentro con Biden, “advirtió que el ataque israelí sobre Rafah, donde 1.4 millones de palestinos están desplazados internamente como resultado de la guerra en Gaza, amenaza con llevar a una nueva masacre”. “Su Majestad subrayó la importancia de todos los esfuerzos que buscan un cese al fuego inmediato en Gaza”, agregó el comunicado.
La Casa Blanca emitió una declaración escrita por separado donde se mencionó que ambos líderes discutieron “la necesidad de una liberación inmediata de los rehenes retenidos por Hamas y un cese al fuego sostenible que permita un aumento de la asistencia humanitaria urgentemente necesaria para ser entregada de manera segura a través de Gaza”.
La administración Biden y los funcionarios israelíes siguen en desacuerdo sobre la incursión militar planeada por Israel en la ciudad sureña de Gaza de Rafah, donde se dijo a los palestinos que comenzaran a evacuar algunas partes el lunes.
Jordania y otros estados árabes han sido muy críticos con las acciones de Israel y han estado exigiendo un alto al fuego desde mediados de octubre, cuando las bajas civiles comenzaron a dispararse. La guerra comenzó después de que Hamas sorprendió a Israel con una incursión transfronteriza el 7 de octubre, en la cual 1,200 personas murieron y 252 rehenes fueron tomados, según cifras israelíes. Más de 34,600 palestinos han muerto y más de 77,000 han resultado heridos en el asalto de Israel, según el ministerio de salud de Gaza.