Los ejecutivos corporativos han expresado sus quejas sobre algunas de las políticas del presidente Biden, así como sobre su retórica. Sin embargo, hasta ahora no lo han abandonado en masa.
Cuando el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Jeffrey Zients, se reunió con docenas de altos ejecutivos en Washington este mes, se encontró con una lista familiar de quejas corporativas sobre el presidente Biden. Los ejecutivos del Business Roundtable, un grupo que representa a algunas de las corporaciones más grandes del país, objetaron las propuestas de Biden para aumentar los impuestos. Cuestionaron la falta de representación empresarial en el gabinete. Se irritaron por lo que llamaron una sobrerregulación por parte de las agencias federales.
Quejas recurrentes
Aunque la reunión no fue antagonista, fue indicativa de tres años y medio de quejas ejecutivas sobre Biden. Los líderes empresariales han criticado sus comentarios sobre la “avaricia corporativa” y su aparición en una línea de piquetes sindicales. Se incomodan con las acciones de los funcionarios que ha nombrado, particularmente la jefa de la Comisión Federal de Comercio, Lina Khan, quien ha tomado medidas para bloquear una serie de fusiones corporativas.
Un número de figuras prominentes en Silicon Valley y en Wall Street —incluyendo a los capitalistas de riesgo David Sacks y Marc Andreessen, y el magnate de fondos de cobertura Kenneth Griffin— han sido cada vez más vocales en sus críticas a Biden, en sus elogios al ex presidente Donald J. Trump, o en ambos.
Preferencias divididas
Aún así, ese cambio refleja principalmente un movimiento entre los ejecutivos que ya apoyaban a políticos republicanos pero que no habían abrazado previamente a Trump. Hay poca evidencia de un cambio importante en la lealtad entre los ejecutivos alejándose de Biden y hacia Trump.
Jeffrey Sonnenfeld, profesor de la Escuela de Administración de Yale que está en contacto frecuente con líderes corporativos, dijo que la mayoría de los directores ejecutivos con los que había hablado preferían a Biden sobre Trump, “algunos de ellos entusiastamente y algunos mordiéndose el labio y tapándose la nariz”.
