El Comité Europeo para la Prevención de la Tortura (CPT) del Consejo de Europa ha publicado un informe en el que pone de manifiesto su preocupación por el hacinamiento en las Prisiones Centrales de Chipre y las deficiencias en las condiciones de detención en las prisiones, los calabozos policiales y los Servicios de Salud Mental.
El informe señala problemas como la falta de personal debido al hacinamiento, con poblaciones carcelarias que superan el millar de reclusos, y unas condiciones de detención inadecuadas, donde las celdas pensadas para menos detenidos albergan ahora a más. Estas observaciones han sido consistentemente registradas a lo largo del tiempo y se han hecho similares respecto a las celdas policiales y los servicios de salud mental en Athalassa.
Las autoridades estatales están preparando sus respuestas a los problemas planteados, que se esperan sean presentadas antes del 18 de marzo. Posteriormente, el Comité publicará su informe final. Aunque las recomendaciones del CPT no son legalmente vinculantes, el estado está obligado a implementarlas a través de otros mecanismos.
Entre las observaciones del Comité se incluye la preocupación por la insuficiencia de personal médico para proporcionar una atención sanitaria integral a la población carcelaria actual. Se ha sugerido reforzar los servicios médicos con la adición de otro psicólogo, dado que el número de reclusos ha aumentado.
Haris Philipides, subdirector de las Prisiones Centrales, ha indicado que se ha desarrollado un plan de acción para cada una de las recomendaciones del Comité, con plazos específicos para monitorear su implementación. Las instrucciones ya han sido dadas para la preparación de un plan de ejecución para las recomendaciones del CPT.
Philipides concluyó afirmando que tanto las observaciones como las críticas constructivas son bienvenidas, “ya que así es como mejoramos”.