El presidente Biden está impulsando cambios significativos para que las grandes corporaciones paguen más impuestos y cuadruplicar el impuesto sobre la recompra de acciones, que beneficia a los inversores adinerados y a los CEO con pagos de impuestos bajos. Su objetivo es aumentar la tasa impositiva corporativa al 28% y el impuesto mínimo corporativo al 21%.
Un Plan Controversial
El plan de Biden busca solucionar el problema de las grandes empresas que pagan pocos o ningún impuesto, lo cual muchos estadounidenses consideran injusto. La meta es que estas grandes corporaciones contribuyan más a las finanzas del país, lo cual puede ser utilizado para servicios públicos e infraestructura. Sin embargo, no todos piensan que esto sea una buena idea.
Kevin O’Leary, empresario y personalidad de televisión, recientemente comentó que aumentar la tasa impositiva corporativa al 28% haría que EE.UU. sea el país menos competitivo del G7. O’Leary explicó: “Las tasas impositivas importan. Escuchaste a Trump hablar sobre 15 a 21 por ciento. Agrega tres a cuatro por cada estado, y te metes en el rango de 21 a 24, 25 para el impuesto corporativo de EE.UU. Eso está más o menos en el medio del camino en cuanto a la competencia. No es lo mejor, pero si vas al 28 y agregas cuatro por ciento, eres el país más no competitivo del G7.”
Esta no es la primera vez que O’Leary critica el aumento de las tasas impositivas corporativas. Hace unos años, advirtió que tales aumentos sofocarían el crecimiento económico al dificultar que las empresas estadounidenses compitan con negocios en otros países, lo cual podría ralentizar la economía y reducir la creación de empleos.
Preocupaciones del FMI
Por otro lado, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha expresado preocupaciones sobre el impacto de la inteligencia artificial en la desigualdad, instando a los gobiernos a proteger sus economías. En un informe reciente, el FMI manifestó estar realmente preocupado por los grandes cambios en el mercado laboral y la mayor desigualdad a medida que la IA se vuelve más común. Cree que los países deberían mejorar los beneficios por desempleo y prepararse para la pérdida de empleos, especialmente en trabajos de mayor calificación, lo cual es diferente de los cambios tecnológicos pasados.
En lugar de imponer impuestos especiales sobre la IA, el FMI sugirió aumentar los impuestos sobre las ganancias de capital, los beneficios y los ingresos corporativos para abordar la desigualdad de riqueza. “Queremos que las personas puedan beneficiarse más ampliamente del potencial que esta tecnología tiene, y queremos asegurarnos de que se creen oportunidades para las personas”, dijo Era Dabla-Norris, Subdirectora del Departamento de Asuntos Fiscales del FMI y coautora del informe, para el Financial Times.