Renovación de Viviendas Sociales: Un Nuevo Horizonte para la Vida Urbana
En el marco de los proyectos de la UE para mejorar la calidad de vida en las ciudades, la vivienda social se encuentra en el centro de una transformación significativa. Trieste, una ciudad italiana con un rico mosaico cultural y una población aproximada de 200,000 habitantes, está poniendo en marcha un ambicioso proyecto que promete ser un modelo a seguir en Europa.
Las autoridades locales han comenzado la demolición de ocho edificios de vivienda social que datan de los años 50, con el objetivo de reemplazarlos por apartamentos energéticamente eficientes. Además, se contempla la creación y mejora de espacios verdes circundantes para fomentar la actividad al aire libre y la interacción social.
Los inquilinos anteriores han sido reubicados en otras viviendas sociales mientras se recogen ideas de los residentes del área para incorporarlas en la renovación integral del barrio. Cristina Davi, gerente de la agencia pública de vivienda ATER Trieste, enfatiza la importancia de la participación comunitaria en el proceso, asegurando que los habitantes de bajos ingresos disfruten de un entorno saludable y agradable.
ATER Trieste forma parte del proyecto SUPERSHINE, financiado por la UE, que busca acelerar la renovación de viviendas sociales para personas con dificultades para pagar sus facturas energéticas. Inspirado en la iniciativa New European Bauhaus, SUPERSHINE tiene como objetivo hacer que la vida en Europa sea más sostenible, saludable e inclusiva.
Trieste es solo un ejemplo dentro de un problema más amplio conocido como “pobreza energética”, que afecta a hogares incapaces de mantener un uso energético adecuado para su bienestar. Riccardo Coletta, líder del proyecto SUPERSHINE, señala que el enfoque no solo debe estar en cómo se compra la energía y sus fuentes, sino también en su uso eficiente.
El proyecto SUPERSHINE está creando distritos modelo caracterizados por edificios eficientes y redes eléctricas inteligentes. Además de Trieste, se incluyen ciudades como Herning en Dinamarca y Riga en Letonia, con planes de extender los modelos a otras cuatro ciudades participantes.
La meta final es crear comunidades energéticas donde los residentes participen plenamente en las decisiones sobre su entorno, con hogares más sostenibles y áreas circundantes más atractivas. Se prevé que las obras en Trieste concluyan a finales del 2026.
La UE tiene como objetivo renovar su parque inmobiliario, mayoritariamente antiguo, para alcanzar un stock de edificaciones cero emisiones para el 2050. Proyectos independientes como Save the Homes han desarrollado “one-stop shops” en ciudades como Rotterdam y Valencia, ofreciendo asesoramiento técnico y financiero sobre renovaciones.
Con un ahorro energético promedio del 50% al 60%, estas iniciativas demuestran el potencial y la necesidad de incrementar las renovaciones para la eficiencia energética. Ana Tisov, líder del proyecto Save the Homes, subraya que las estrategias deben adaptarse a las condiciones locales, ya que cada lugar presenta desafíos únicos.
Este artículo fue publicado originalmente en Horizon, la revista de Investigación e Innovación de la UE.