La Importancia de No Intervenir con los Muflones Recién Nacidos
Con la llegada de la primavera y la temporada de cría, los tranquilos alrededores del bosque de Paphos y el terreno accidentado de Troodos son testigos de la aparición solitaria del muflón recién nacido, emblema de la belleza natural de Chipre. Sin embargo, esta escena conmovedora lleva consigo una advertencia.
El servicio de juego y fauna está alertando sobre las intervenciones bienintencionadas de individuos que creen estar rescatando a animales recién nacidos huérfanos, pero que sin querer ponen en peligro la vida silvestre. Según Nikos Kassinis, oficial superior del servicio de juego y fauna, estas crías, generalmente vistas solas a menos que sean gemelas, están típicamente seguras. La hembra del muflón deja a su cría muchas horas sola para forrajear y satisfacer las demandas de la lactancia.
La presencia humana puede desencadenar los instintos protectores de la madre, llevándola a esconderse y dejando al recién nacido solo. Incidentes recientes, donde los transeúntes confundieron corderos solitarios con huérfanos e intervinieron, subrayan las consecuencias imprevistas de tales acciones. La semana pasada, hubo dos casos en los que personas en senderos naturales encontraron un cordero y, pensando erróneamente que era huérfano, lo trasladaron a los servicios de vida silvestre.
“Las personas tenían buenas intenciones pero condenaron sin saberlo a especies en peligro de extinción a una vida de cautiverio”, dijo Kassinis. Los animales en peligro de Pedoulas y Troodos han sido llevados al hospital de rehabilitación de vida silvestre en la capital ya que necesitan cuidados las 24 horas. La alimentación con biberón elimina la posibilidad de que vuelvan a ser liberados a la naturaleza porque se vuelven dependientes de los humanos.
Si bien su supervivencia no está garantizada, si sobreviven, es probable que terminen en un zoológico o en instalaciones cerradas como el gran hospital de rehabilitación de vida silvestre actualmente en construcción en Geri. Esto se debe a que interrumpir el vínculo crucial entre los recién nacidos y sus madres compromete sus instintos de supervivencia. “Pierden el miedo a los humanos, que es su mayor herramienta para sobrevivir [en la naturaleza]”, enfatizó el oficial de vida silvestre.
El consejo es claro: la mayoría de los recién nacidos solitarios no están huérfanos y deben permanecer sin ser molestados en su hábitat natural. Además, los corderos de muflón criados junto a sus madres muestran tasas de supervivencia notablemente más altas que aquellos criados por humanos bajo circunstancias específicas. La literatura revela una alarmante probabilidad del 85 por ciento de mortalidad dentro de los tres meses posteriores a la liberación para corderos de muflón criados y nutridos en cautiverio.
Al encontrar un muflón recién nacido en estado salvaje, es crucial evaluar su condición para determinar si requiere asistencia. El servicio de juego y fauna lista varios indicadores que pueden ayudar a discernir si el joven muflón está herido o huérfano. Entre estos se incluyen sus vocalizaciones, la presencia de parásitos, su postura y la evaluación de lesiones. En caso de observar cualquiera de estos signos, se aconseja contactar a los servicios de vida silvestre con detalles completos sobre la condición y ubicación del muflón para recibir asistencia adecuada.
Con el muflón chipriota (Ovis gmelini ophion) siendo una subespecie en peligro única en la isla, preservar sus comportamientos naturales y hábitats es primordial para su supervivencia.