La tensión aumenta en Oriente Medio tras ataque con drones y misiles
En un giro inesperado que ha elevado la tensión en Oriente Medio, el presidente Joe Biden advirtió al primer ministro Benjamin Netanyahu de que EE. UU. no participaría en una contraofensiva contra Irán si Israel decide tomar represalias por un ataque masivo con drones y misiles contra territorio israelí durante la noche. Un funcionario de la Casa Blanca confirmó esta postura, que resalta la delicada situación que enfrenta la región tras el reciente ataque.
Según informes de medios estadounidenses, Biden comunicó su decisión a Netanyahu en una llamada telefónica nocturna. John Kirby, el principal portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, reiteró en el programa “This Week” de ABC que mientras EE. UU. seguirá apoyando a Israel en su defensa, no desea entrar en guerra.
El ataque de Irán, que se produjo como respuesta a un presunto ataque israelí en su consulado en Siria el 1 de abril, involucró más de 300 misiles y drones, la mayoría lanzados desde Irán, causando daños modestos gracias a la intervención de EE. UU., Reino Unido y Jordania. A pesar de los ataques, una base aérea en el sur de Israel continuó operando con normalidad y solo se reportaron heridas graves en un niño de 7 años.
Altos funcionarios israelíes han señalado que una represalia inmediata no es inminente y que Israel no actuará solo. “Construiremos una coalición regional y cobraremos el precio a Irán en la forma y el momento que sea adecuado para nosotros”, dijo Benny Gantz, ministro centrista, antes de una reunión del gabinete de guerra.
Por otro lado, el jefe del ejército iraní, el mayor general Mohammad Bagheri, advirtió que “nuestra respuesta será mucho mayor que la acción militar de esta noche si Israel toma represalias contra Irán”. Además, Amir Abdollahian, ministro de Relaciones Exteriores de Irán, indicó que se había informado a Estados Unidos que el ataque contra Israel sería “limitado” y en defensa propia.
Mientras tanto, potencias globales y naciones árabes han hecho llamados a la contención para evitar una escalada mayor. El Consejo de Seguridad de la ONU tenía previsto reunirse para discutir la situación. “Haremos todo lo posible para detener una mayor escalación”, declaró el canciller alemán Olaf Scholz durante una visita a China.
Los analistas debaten si el ataque de Irán buscaba causar una devastación real en Israel o simplemente responder a nivel interno tras promesas de venganza, evitando así desencadenar una guerra mayor. La situación sigue siendo volátil y las decisiones tomadas en los próximos días podrían determinar el curso de los acontecimientos en una región ya marcada por conflictos prolongados.