Incidentes en la protesta de Limassol
Una marcha de protesta en Limassol se saldó con varios heridos y diez detenidos, y los participantes denunciaron brutalidad policial. La manifestación, que comenzó como una marcha contra los elevados alquileres en la calle Anexartisias alrededor de las 5 p.m. del sábado, tomó un giro inesperado cuando aproximadamente 20 manifestantes se dirigieron hacia el edificio del Departamento de Investigación Criminal de Limassol (CID), elevando sus voces en demanda de una investigación justa sobre la muerte del inmigrante bangladeshí Anisur Rahman, ocurrida el 10 de abril.
Los enfrentamientos entre los manifestantes y la policía no se hicieron esperar. Las autoridades afirmaron que los protestantes mostraron agresión hacia los oficiales, quienes procedieron a disolver la concentración. Sin embargo, los participantes en la protesta disputaron esta versión, describiendo el choque como un “ataque no provocado”. “Después de la protesta por los altos alquileres, nos dirigimos hacia el CID de Limassol. Estábamos pacíficamente en la acera cuando la policía se abalanzó sobre nosotros”, relató un manifestante bajo condición de anonimato a in-cyprus.
“Nos persiguieron durante 600-700 metros y nos lanzaron insultos verbales, amenazando con golpearnos”, agregó, señalando que dos de sus amigos fueron hospitalizados con contusiones. Otro manifestante, que también prefirió mantener su identidad en reserva, indicó que resultó herido después de que un oficial lo hizo tropezar durante la persecución.
Por su parte, la policía informó que el jefe de la Oficina de Prevención del Crimen de Limassol resultó lesionado durante los disturbios y fue trasladado al Hospital General de la ciudad. Este ha sido el tercer acto de protesta tras la muerte de Rahman, ya que se llevaron a cabo dos marchas en Limassol el 13 de abril y en Nicosia el 20 de abril.
Antecedentes del caso
El miércoles 10 de abril, en una operación policial temprano por la mañana, oficiales allanaron un apartamento en el quinto piso de un edificio en Limassol, actuando bajo una pista sobre migrantes indocumentados viviendo allí. Dos hombres, ambos extranjeros, intentaron escapar saltando por la ventana. La caída causó la muerte de Anisur Rahman, un joven trabajador de Bangladesh de 19 años, mientras que el otro hombre sufrió heridas graves que requirieron hospitalización.
La policía sostuvo que dos oficiales de la unidad de Extranjería e Inmigración ingresaron al apartamento después de tocar a la puerta y obtener el consentimiento de los residentes. Sin embargo, esta versión ha sido disputada por K.S., una persona que vivía en el apartamento y fue testigo del allanamiento policial, quien declaró: “El miércoles había 15 personas sin uniformes, rompieron la puerta por la mañana y golpearon a la persona que estaba junto a ella. Luego golpearon a otra persona”. K.S. también mencionó que se obligó a los compañeros de piso a firmar solicitudes de retorno voluntario.
La organización antirracista KISA también ha cuestionado la versión de los hechos ofrecida por la policía sobre el allanamiento, refiriéndose a testigos que afirman que la policía entró por la fuerza en el apartamento sin el consentimiento de los ocupantes. La Autoridad Independiente para la Investigación de Alegaciones y Quejas Contra la Policía (IAIACAP) ha nombrado a dos investigadores criminales para examinar las circunstancias que rodearon la muerte de Rahman.
