Avances en el estudio coste-beneficio para el proyecto eléctrico Great Sea Interconnector
El operador independiente de transmisión de energía de Grecia, Admie, ha anunciado que los primeros resultados del estudio coste-beneficio solicitado por el Ministerio de Energía para el proyecto eléctrico Great Sea Interconnector se darán a conocer a finales de mayo. Este proyecto, conocido anteriormente como EuroAsia Interconnector, es un ambicioso plan que busca conectar las redes eléctricas de Chipre, Grecia e Israel mediante un cable submarino.
El ministro de Energía, George Papastasiou, había solicitado este estudio en una carta dirigida a Admie el pasado 2 de abril de 2024. En respuesta a la solicitud de información por parte del ministerio chipriota de energía sobre el avance del estudio, se han programado reuniones inminentes entre los operadores de Admie y funcionarios de los ministerios de energía y finanzas de ambos países.
Admie ha enfatizado la importancia de abordar con prontitud las decisiones regulatorias pendientes por parte de las autoridades reguladoras griegas y chipriotas para la sostenibilidad del proyecto. “Cualquier retraso adicional supondrá una carga para los consumidores de electricidad en ambos países”, agregaron en el comunicado.
Recientemente, la Autoridad Reguladora de Energía, Residuos y Agua (RAEWW) ha adoptado una postura positiva respecto al método de entrada para el interconector, lo que Admie considera un hito significativo para la implementación fluida del proyecto. Se espera que el proceso de consulta se complete antes de finales de mayo, y Admie presentará sus comentarios sobre la metodología propuesta a RAEWW en los próximos días.
El mes pasado, Papanastasiou aseguró que los consumidores chipriotas no deberían pagar nada por el Great Sea Interconnector hasta que el proyecto esté operativo. “Es una cuestión de principios”, afirmó. “Mientras el cable no esté en funcionamiento, nadie está justificado para cobrar por futuros flujos de electricidad”.
El proyecto, cuyo costo se estima en 1.9 mil millones de euros, se espera que esté operativo en 2029. Dados los múltiples beneficios que conlleva, como la capacidad desbloqueada para las energías renovables, se espera que los gastos se recuperen rápidamente una vez que esté en marcha. Actualmente, Chipre asumirá el 63 por ciento del costo y Grecia el 37 por ciento, debido a que los beneficios para los consumidores chipriotas son mucho mayores.
