La contracción de la actividad fabril en Turquía se hizo evidente nuevamente en mayo, ya que una ralentización de la demanda llevó a las empresas a reducir la producción y el empleo, según una encuesta publicada el lunes. El Índice de Gerentes de Compras (PMI) para la manufactura turca cayó a 48.4 desde 49.3 en abril, de acuerdo con un estudio realizado por la Cámara de Industria de Estambul y S&P Global, descendiendo aún más por debajo del nivel de 50 puntos que marca el crecimiento en la actividad.
Desafíos en la Demanda y Precios Altos
Las empresas informaron una caída en los nuevos pedidos, incluidos los pedidos de exportación, debido a las desafiantes condiciones de demanda y los altos precios, según mostró la encuesta. Esta ralentización de la demanda llevó a los fabricantes a reducir la producción y disminuir los niveles de personal, con algunas empresas reacias a reemplazar al personal que se marchaba debido a la menor carga de trabajo.
Presiones Inflacionarias y Esperanza de Recuperación
Las presiones inflacionarias continuaron disminuyendo el mes pasado, ya que tanto los precios de los insumos como los precios de salida continuaron aumentando, pero a un ritmo más lento, según el estudio. Andrew Harker, director de economía en S&P Global Market Intelligence, comentó: “Los últimos datos sugieren que los fabricantes turcos están enfrentando un entorno operativo cada vez más desafiante, con nuevos trabajos aparentemente más difíciles de conseguir”.
“Una luz en el horizonte viene en forma de suavización de las presiones inflacionarias. Dado el impacto aún perjudicial que los precios altos están teniendo en la demanda, una disminución de estas presiones podría ayudar a llevar a una recuperación en el sector durante la segunda mitad del año”, agregó Harker.
En resumen, la actividad fabril turca sigue enfrentando desafíos significativos debido a la ralentización de la demanda, lo que ha llevado a una reducción en la producción y el empleo. Sin embargo, la disminución gradual de las presiones inflacionarias ofrece un rayo de esperanza para una posible recuperación futura.